miércoles, 13 de diciembre de 2017
El Poder Estelar de Johnny Hallyday (Jimi Hendrix fue su artista alternativo)
Dana Thomas. The New York Times. 7 de diciembre de 2017.
Pocas personas en Estados Unidos habían, o han sabido de Johnny Hallyday, la estrella de rock conocido como el Elvis de Francia, quien falleció esta semana a la edad de 74 años. Pero como dijera una vez el gurú de las relaciones públicas francés, Gilles Plaquet, “En Francia, desde 1945, ha habido tres estrellas: de Gaulle, Brigitte Bardot y Johnny Hallyday”.
Como prueba de esto, para celebrar su cumpleaños 50, en junio de 1993, Mr. Hallyday realizó tres mega conciertos en el estadio Parc des Princes de Paris, cada uno tuvo una audiencia de 60.000 personas y contó con una tarima de 120 metros; una plataforma construida en la base militar de la ciudad francesa de Strasbourg, que simulaba los rascacielos de Nueva York; 100 miembros de su club de motocicletas Harley Davidson, el Desperados, lo escoltó a través de un puente sobre la multitud; una banda de 20 músicos; un grupo grande de coristas sexy; un ballet de carros estadounidenses; acróbatas saltando desde los techos; y fuegos artificiales.
Antes de eso, Mr. Hallyday se sentó en su casa de la 16th Arrondissement de Paris para reflexionar sobre su carrera, en una entrevista que se publica aquí por primera vez.
¿Cuántos discos ha grabado usted?
No lo sé. De verdad no lo sé. Muchos. En los años ’70 hacíamos discos con la misma frecuencia con que íbamos al cine. Podíamos hacer un disco en seis semanas. Ahora eso nos lleva seis meses. En el último disco, el cual hicimos en Nueva York, trabajé con Richie Sambora de Bon Jovi. Jon Bon Jovi, está escribiendo dos canciones para mi próximo disco, con Richie. Richie es un buen amigo mío, y estoy orgulloso de eso, porque honestamente, me gusta lo que hace.
¿Qué es el rock ‘n’ roll?
Ya no hay más rock ‘n’ roll. Para mí el rock ‘n’ roll murió al final de la década de 1960. Hay música básica, pero no rock ‘n’ roll. No me gusta el rap. No lo odio. Escucharía uno bueno, pero nunca lo interpretaría.
¿Hay música pop buena?
No mucha. En Francia la única es de Vanessa Paradis. Lo que tiene adentro, lo que ella da que nunca puedes aprender. Ella es como Brigitte Bardot. Brigitte Bardot no era una buena actriz pero nadie podía interpretar un papel como ella lo hacía porque tenía algo más. Vanessa es igual.
Cuénteme de sus inicios en la música.
Tenía 16 años de edad cuando grabé mi primer disco. No quería ser cantante. Quería ser actor y fui a la escuela de teatro en Paris, pero era costoso y las personas quienes me criaron no tenían tanto dinero. Así que empecé a tocar rock ‘n’ roll en clubes de baile los fines de semana para pagar mis clases de actuación. Entonces me convertí en cantante.
Usted dijo “quienes me criaron”. ¿Eso significa que no eran sus padres?
Mi padre dejó a mi madre cuando yo tenía seis meses de edad, y mi madre era modelo y no podía hacerse cargo de mí. Así que la hermana de mi padre se encargó de mí, y ella tenía una hija quien era bailarina, quien se casó con un estadounidense llamado Lee Halliday. Ellos me llevaron de gira. Mi nombre es Jean-Philippe Smet, pero adopté el nombre Johnny Hallyday porque ellos me llamaban John. Fui criado por un estadounidense.
¿Es por eso que siempre se ha inclinado por el rock estadounidense? ¿Y hace versiones francesas de canciones estadounidenses?
Si. Mis músicos favoritos son estadounidenses. A principios de los años ’60, Eddie Cochran y Gene Vincent. Despues, Creedence Clearwater Revival, y después, un poco Rick James. Y Jimi Hendrix.
Él fue my artista alternativo por un tiempo. Lo descubrí en Londres en un club una noche. Yo estaba con Otis Redding, comíamos en el restaurant del club, y oimos esa guitarra increíble. Fuimos a ver quien estaba tocando, y era Jimi. Yo estaba por empezar una gira por Europa, y necesitaba un artista alternativo, le dije, “¿Quieres ser mi complemento?” Y el dijo, “Si”. Así que estuvo de gira conmigo por seis meses, y nos hicimos amigos.
Despues que él hizo “Hey Joe”, me dijo, “Tengo una versión que no estoy usando ¿La quieres?” Le dije, “Si”. Fui a Londres y grabé “Hey Joe” en francés, con Jimi Hendrix tocando la acústica. Esa fue una número 1 por dos meses.
Despues de eso, él se convirtió…bien tu sabes de Jimi. Empezó a tomar todas esas drogas, y luego falleció. Alguien a quien extraño en mi vida es a Jimi. Jimi fue uno de mis pocos mejores amigos. Odio a las drogas por eso. Las drogas se han llevado a todos los buenos amigos que conocí.
¿Le gusta ser una estrella?
No. No mucho.
¿Por qué?
Bien, porque es dificil vivir la vida siendo estrella. Yo era muy joven cuando empecé. Siento como si hubiera perdido mi vida adulta. Como compartir con una mujer, ser estrella ha afectado todo. Me refiero a que no puedo vivir una vida normal con una mujer. Una mujer quien quiera tener hijos. Me gustaría tener una vida normal, con esposa e hijos que llevar a la escuela, pero no sé si sería capaz. Es difícil encontrar esa mujer. Estoy intentándolo, espero encontrarla antes de morir.
Traducción: Alfonso L. Tusa C.
sábado, 9 de diciembre de 2017
‘Serpico’ de Sidney Lumet: La Lucha de un Hombre Honesto contra el Sistema.
Cinephillia&Beyond.
La leyenda dice que cuando Al Pacino le preguntó a Frank Serpico por qué le había soplado el silbato a la corrupción de la policía de Nueva York, Serpico respondió, ‘Si no lo hubiera hecho, ¿quien sería cuando escuchara una pieza musical?’ Al haberse unido al cuerpo policial en 1959, Serpico trabajó con dedicación por 12 años, lidiando constantemente con la carga de saber que una gran parte de la fuerza policial estaba sucia. Cuando finalmente decidió que estaba harto de eso y habló con sus superiores, fue forzado a resistir muchos sobornos de parte de sus compañeros policías, que terminaron en un sospechoso incidente que algunos claman que fue orquestado por la policía, recibió un disparo en la cara durante un allanamiento por drogas. Desilusionado, Serpico viajó a Suiza, y regresó a Estados Unidos en 1980. Pero su historia llegó pronto a los titulares y alcanzó una audiencia más amplia de lo que se pudiera haber imaginado.
El Serpico de Sidney Lumet fue crítico y taquillero, lanzando a Al Pacino al estrellato total. Él ya era bien conocido por su papel en El Padrino de Francis Ford Coppola, pero Serpico fue donde floreció en toda su pasión y gloria, al cargar la película en sus hombros y dando la incomparable actuación de un ser humano enfocado, apasionado y sobre todo complejo. En esa época, Martin Bregman era un gerente capaz, que representaba a una variedad de personas de la industria del cine, pero quería saltar hacia el lado de la producción. Al enterarse de Peter Maas y su libro ‘Serpico’, Bregman decidió que ese iba a ser su primer intento en la producción, inmediatamente adquirió los servicios de Pacino para el crucial papel. Waldo Salt fue empleado como guionista, y Norman Wexler se unió pronto al proyecto con la misión de resumir el guión y limpiar su estructura. Sidney Lumet solo llegó a la silla de director después que el cineasta John G. Avildsen salió del proyecto debido a algunas diferencias que tuvo con Bregman. Arthur J. Ornitz estaba detrás de la cámara, fue empleada la legendaria editora Dorothea ‘Dede’ Allen, y Michael ‘Mikis’ Theodorakis aportó la música. Finalmente todas las piezas estaban juntas, con todos los ingredientes apropiados para una verdadera película clásica.
El aire de realismo era especialmente importante para Lumet, lo cual explica por qué prácticamente utilizó actores desconocidos junto a Pacino, para que la audiencia no se distrajera y se enfocara en la historia a capacidad completa. El deseo de hacer parecer la película tan auténtica como fuera posible también llevó a Lumet a filmar Serpico en 110 diferentes lugares de Nueva York.
Aunque el productor fue advertido de que no era un buen tiempo para hacer un drama policial, porque se habían hecho muchas películas policiales de baja calidad los años previos, parece que la audiencia olvidó eso. Una de las principales razones por las que Serpico fue recibida de manera tan entusiasta fue precisamente por el tiempo cuando fue estrenada. Estados Unidos estaba plagado por el escándalo de Watergate, un golpe en la cara que dejó a muchos estadounidenses con la necesidad de reexaminarse a si mismos y su fe en el gobierno y la ley. No es difícil imaginar porque la historia de un oficial de policía honesto y dedicado que se levanta contra el sistema corrupto, motivaría al cinéfilo promedio.
Serpico todavía es una de las actuaciones más impresionantes de uno de los actores más grandes de Hollywood, un estudio detallado de personaje moldeado convenientemente en el formato de un atractivo drama policial, y una película ejecutada magistralmente con un tema que aun es relevante e intenso como lo fue en los setenta.
“Leí el guión y pensé, otra película de policías. Entonces Waldo Salt vino con un guión con el que me podía relacionar y yo estaba allí. Entonces conocí a Frank Serpico. En el momento cuando le estreché la mano y lo miré a los ojos, comprendí lo que podía ser esa película. Pensé que había algo alli que podía interpretar. Salí con los policías una noche, lo hice por unos cinco minutos y dije, ‘No puedo hacer ese trabajo’. Así que me mantuve al lado de Frank lo suficiente para sentirlo. Una vez estábamos en mi casa alquilada de playa en Montauk. Estábamos sentados mirando el agua. Y pensé, bien, voy a ser como los demás y haré una pregunta necia, la cual fue, ‘¿Por qué Frank? ¿Por qué lo hiciste?’ Él dijo, ‘Bien, Al, no lo sé. Me parece que tengo que decir que sería porque…si no lo hubiese hecho, ¿quién sería yo cuando escuchara un poco de música?’ Me dije, ¡que manera de justificarse! Ese es el tipo de persona que él era. Disfruté su compañía. Había dolor en sus ojos”. Al Pacino, the Playboy Interview.
Serpico puede ser la película fundamental de Sidney Lumet. Una mezcla de realismo urbano, personajes de carácter y narrativa concisa, Serpico también es una gran película de la ciudad de Nueva York que hace uso expresivo de sus numerosas locaciones en Manhattan, el Bronx, Brooklyn, y Queens. Al Pacino aporta una gran actuación como el policía de Nueva York, idealista y excéntrico quien puso en evidencia la corrupción en el departamento de policía. El estilo comprometido y poco pretencioso de Lumet aparece a todo dar en esta discusión de amplio rango, la cual ocurrió luego de una grabación especial de un guión nuevo de Serpico, pocos meses después que Lumet recibiera un Oscar honorario. Cortesía de Pinewood Dialogues, Moving Image Source.
¿Conoció usted al verdadero Serpico? ¿Cómo era él?
Lumet: Si. Conocí a Frank, era un tipo fascinante.Siempre tuve un presentimiento con él. No sé, Al y yo hablábamos de eso; no sé si Al coincidía conmigo. Siempre sentí que él era un rebelde, punto. Que si actuaba de esa manera porque había sido panadero (Risas). Que cualquiera que estuviese por encima de él, automáticamente era su enemigo. Gracias a Dios él tenía el trabajo que tenía. Pero sabes que una vez, Bob Leuci dijo algo fascinante que creo es verdad, porque Bob lo dijo, y le creo. Al hablar de corrupción, él dijo, “En cualquier momento, cinco por ciento de la policía es irremediablemente corrupto, cinco por ciento nunca será corrupto, y el otro noventa por ciento se comportará de acuerdo a la atmósfera del departamento”. Con eso quiso decir, ¿Quién es el comisionado de la policía? Empezando con eso, y el filtrado. Siempre pensé que eso era fascinante, porque se aplicaba a la situación de Serpico, era una época terrible. Me refiero a que algo como la Knapp Comission no fue reportado suavemente, eso no fue organizado suavemente. Ni funcionaban ligeramente. Y por supuesto, no hubo resultados. Sabes, por tres años las personas mantuvieron sus narices limpias.
¿Qué hay de usted? Me refiero, ¿Cómo es hacer una película? Parece un acto de coraje, también, hacer una película.
¡A todos le gusta! (risas). Todos quieren estar en la película. Pienso que todos quieren dirigir. No, esta película fue divertida, porque filmaba en locaciones, trabajaba en locaciones, trabajaba en hospitales. Y no solo no hubo problemas, hubo mucha ayuda, desde todas partes. Entre esta película y Prince of the City y Tarde de Perros, la gente decía, “Has hecho muchas películas antipolicía”. La cosa fascinante de que me percaté es que ellos no piensan que son antipolicía. No solo les gusta esas películas, les fascinan porque como me lo han dicho una y otra vez, “Así es como en realidad ocurren las cosas”. Soy cuidadoso de no caer en el melodrama. No sobredramatizo; no llevo un conteo de choques. Ellos entienden eso. Serpico nunca traicionó a sus amigos porque no tenía amigos. (Risas). Pero Leuci traicionó a los tipos con quienes trabajaba por siete años.
Usted dijo en su libro que tenía cierta ambivalencia sobre el personaje, alguien quien fue una piedra en el zapato y siempre denunciando, ese fue el personaje que Pacino interpretó, pero Pacino hizo que usted quisiera al personaje. Y usted mostró a la vez el lado excéntrico de él.
Su lado excéntrico y su lado de piedra en el zapato. Eso fue muy triste, porque Al compartió con él por alrededor de un mes antes que empezáramos a filmar. Y yo llegué tarde a la película, reemplacé a otro director. Solo tuve cinco semanas de preparación. No se había escogido los lugares de filmación, no se había hecho nada. Pero yo estaba claro en algo. Le dije a Al, “No socialices mucho con él. Porque él se tiene que ir”. Y Al dijo, “¿Qué quieres decir?” Le respondí, “¿vas a aceptar filmar con el viendo desde los alrededores?” Por supuesto, él vio el punto de lo que quería decir. Y cuando se lo dije a Frank, se lo puse de esta manera, “Frank no te puedo tener aquí durante la filmación, ni en los ensayos. Eso afectaría mucho a todos, incluyendo a Al. Le rompí el corazón. Se fue. Desde entonces no me ha hablado.
Entonces, ¿usted nunca supo como le pareció a él la película?
Si, yo estaba ahí cuando el la vio. Sentí que le debía eso. Y le gustó.
Una de las cosas que perdura positiva en el tiempo es el retrato de la ciudad, las locaciones. Usted está en todas partes de la ciudad en esta película. Está en Queens, muy cerca de Astoria; está en Brooklyn, el Bronx, Manhattan. ¿Podría hablar un poco del proceso de selección de locaciones y de trabajar en Nueva York?
Cuando empiezas una pelicula, decides no solo de lo que va a tratar, sino de la manera como quieres contar la historia, lo cual es una forma muy simple de esa palabra terriblemente complicada que se sigue usando, llamada “estilo”. “Estilo es ¿Como quieres contar la historia? Lo grande acerca de Nueva York es que te permite, estando en las locaciones, sin ir para nada a un estudio, escoger cualquier estilo que quieras. La ciudad es capaz de inspirar muchos sentimientos diferentes, muchos estados de ánimos diferentes, muchas declaraciones. Hasta el presente, he tenido setecientas locaciones aquí que nunca he usado.
¿Cómo es el proceso de selección de locaciones?
Aburrido (Risas). Paseas en un carro y vas a esta cuadra y esa cuadra, “Para aquí”. Sales, miras, tomas nota. Regresas al carro y, de verdad es aburrido. Excepto que es emocionante cuando empiezas a obtener la acumulación de lo que has mirado. Hay un momento en una película, cuando trabajas en ella, donde quieres, esperas, eso no siempre ocurre, que esta empiece a hablar contigo. Una de las cosas maravillosas acerca de mirar locaciones es cuando estas te hablan. Si tengo que cambiar las cosas, solo voy a otra locación. No quiero cambiar eso, quiero que lo que esté allí funcione para mí. En casi cada instancia, cada locación en la que he trabajado me permitió hacer más de lo que tenía en mente en principio, me dio más de lo que imaginaba.
Me parece que eso también ocurre con el vestuario. No sé que tanto recuerda usted la selección de la ropa o sombreros, pero esa es una parte importante de la película. Y usted ha hablado de la importancia del vestuario para que un actor encuentre a su personaje.
Anna Hill Johnstone, quien trabajó en esta película, y muchos otras películas mías hasta que se retiró, una de las maravillas de ella era que tenía la habilidad de lograr el estilo de la película, sin que notaras que el estilo se estaba manifestando. Gracias a Dios que el tiempo de duración es largo, así que nunca ves como ocurre el estilo, porque cambia a través de la película. Luego de largas discusiones, Anna Hill se aparecía con la solución increíble. Y estoy asombrado de que nunca nadie haya notado que a medida que nos internamos en las escenas de la corte, las personas aparecen más y más negras; la vestimenta se hace más oscura, hasta que finalmente en una escena de la corte, todos visten de negro. Nunca ves como ocurre eso.
También me impresionó que la iluminación es un factor, que usted usa las sombras a través de la película.
Bien, hay un límite para controlar la locación. En los interiores, se puede hacer lo que se quiera, pero en exteriores, obviamente, todo dependerá de la presencia o ausencia de sol. No hubo un intento deliberado de hacer eso en la película. Hubo un intento, como se puede ver con Al, para hacerlo más y más oscuro.
Usted ha hecho tres películas con Dede Allen; quiero preguntarle como es trabajar con ella. Ella es una editora muy brillante. Usted hizo Tarde de Perros y The Wiz con ella.
Bien, ¿qué se puede decir de Dede?
Y asumo que usted estuvo muy involucrado en el proceso de edición. Asumo que usted estuvo involucrado en cada parte.
Ellos no pueden sacar los palillos sin que yo esté allí. (Risas). Pero Dede es otra cosa. Es fascinante. No sé cuantos de ustedes son estudiantes de cine o consiguen las revistas más esotéricas. Las personas siempre hablan acerca de editar. Solo hay tres personas que saben si una película está bien editada o no: el director, el camarógrafo y el editor.. Nadie más lo sabe. Porque puede parecer maravillosamente editada, pero solo Dios sabe que fue omitido, puede parecer terriblemente editada, pero fue filmada tan mal que es un milagro que la historia tenga sentido. (Risas). No puedes saber eso. Recuerdo una vez, he olvidado con cual película que hice, apareció una revisión, y hablaba prolongadamente de la edición de Dede, y que se podía ver “El Estilo de Edición de Dede Allen”. Bien, la persona quien se hubiera lanzado del edificio Empire State habría sido Dede, porque ella se enorgullecía de convertirse en la editora que ese director particular quería. Ella trabajaba totalmente diferente con George Roy Hill en comparación a como lo hacía conmigo. Trabajaba totalmente diferente con Warren Beatty a como lo hacía con cualquiera de nosotros. Se adaptaba a cualquier película y director. Y donde era más brillante era que si yo tenía una imagen de la manera que yo sentía que la escena debería ser editada, ella podía recrear mi intención mejor de lo que yo lo hubiera hecho. Y ella adivinaba mi intención. No se trataba de algo que ella quería incluir en la película. Ella veía lo que yo buscaba, y podía lograrlo mejor que yo, lo cual es muy difícil.
¿Qué tanto de ese trabajo tenía que ver con las actuaciones, mirando a diferentes tomas y escogiendo las mejores actuaciones, o con cosas más estructurales?
Bien, la selección de cual toma para tal actuación ocurre muy temprano. Nos sentamos, y Dede se ubica a mi lado, y vemos las dos o tres tomas que hemos hecho, y yo digo, “Toma uno, toma tres”, Y esa será la selección. Y la única razón por la que cambiaríamos sería una razón técnica.
Ha habido muchos comentarios ahora, mirando hacia atrás, acerca de la década de 1970, y el período de comienzos de los setenta considerado una época dorada, un momento muy sorprendente de la cinematografía. Y como alguien quien ha trabajado desde los años cincuenta hasta ahora, ¿Lo ve usted de esa forma? ¿Fue usted capaz de hacer películas más provocativas, interesantes? ¿Hubo una apertura en ese período inicial de los setenta?
No pienso que sea así. Me parece que lo mismo que ocurría antes, ocurre ahora. (Risas). El problema ahora es serio, porque todo es tan corporativo, que cada estudio es propiedad de algo más grande que el estudio. Es algo ridículo, que Columbia Pictures haya rescatado a Sony Corporation. Sony Pictures de ese año aportó el margen de ganancia de Sony, el cual fue de pérdida de dinero, con todos los iPods y lo que sea que hacen, sus televisores. De hecho, ahora, después de la venta de armamento el factor más grande en la balanza de pagos en Estados Unidos son armamentos de entretenimiento, número uno, entretenimiento, número dos. Eso significa libros, discos, películas, DVD, etc. Pero eso es lo enorme que es ahora. Que hoy una pelicula pueda ganar un billón de dólares, como dijo el tipo en la película, “Eso es dinero en serio”. (Risas).
Bien, una de las cosas que se dice de los setenta es que llegó un punto cuando Hollywood empezó a buscar películas costosas. ¿Piensa usted que Hollywood podía seguir haciendo peliculas modestas antes de eso?
Para nada. La memoria de las personas es corta. Como se sabe, los términos bajo los cuales se proyecta una película en un teatro o en una cadena de teatros, siempre son negociables. Pueden variar desde el estudio obteniendo diez por ciento y el teatro noventa, hasta el estudio obteniendo noventa y el teatro diez por ciento. Y todo eso esta abierto a la negociación, para cada película. Por ejemplo, cuando yo era un muchacho, si querías que tu película se exhibiera en el Radio City Music Hall en Navidad, ellos se quedaban con el noventa por ciento; y tu con el diez, ¡ porque ellos no necesitaban tu película ! Tenían a las Rockettes. (Risas). No, en serio. Lo que te daba eso era que ganabas publicidad en el resto del país, “Como vista en Radio City Music Hall”. Pero el teatro en sí, era un factor poderoso en el estreno y la distribución de la película. De manera que el caos de la exhibición en la actualidad no es peor de lo que siempre fue. El otro día fui a ver Capote en un complejo de ocho teatros, se proyectaba en cuatro de ellos. Podías empezar a ver la película cada media hora, (Risas) lo cual era maravilloso. Pero eso es rudo para las otras películas.
¿Qué tal era Dino De Laurentis como productor?
Oh, ah. Siento un gran afecto por él. Era cruel y encantador; tenía un gran gusto; era un gran cocinero; y amaba las películas, amaba las películas. Pasamos un gran momento con esta película, hasta que la terminé. Yo no quería ninguna música para esta película. En aquellos días yo no tenía edición final. Dino quería música y yo sabía que si no hacía algo al respecto, el regresaría a Italia y Nino Rota caería largo a largo sobre la alfombra del piso. (Risas). Supe de manera accidental que un maravilloso compositor y gran activista político de nombre Mikis Theodorakis, un compositor griego, recién había salido de la cárcel. El gobierno griego de esa época era fascista, y él había pasado más de un año en la cárcel. Y supuse, que caramba, que él iba a necesitar dinero (Risas). Lo encontré en Paris, veinticuatro horas luego de ser liberado. Salió de Grecia de inmediato. Lo encontré en Paris y le dije la verdad. “Mikis, no pienso que la película necesite música, pero estoy aterrorizado de lo que pueda ocurrir si no le busco una, porque entonces Dino le pondrá una. Pensé que esto podía ser maravilloso para ti, porque sé lo que hay en el presupuesto y podrías ponerte rápidamente en setenta y cinco mil dólares con esto”. También le dije, “Voy a tomar el próximo vuelo”. (Risas). Él llegó a Nueva York el día siguiente; su vuelo estuvo retrasado. Estaba esperando por él en Technicolor, en la sala de proyecciones; llego alrededor de las dos am. Proyectamos la película. Le gustó mucho. Dijo, “Tienes toda la razón, no debería tener música…sin embargo…” (Lo estaba retando y el me retaba a la vez. Era encantador). (Risas). Sacó un cassette de su bolsillo. Dijo, “Hace muchos años, escribí algo pequeño que podría servir para la película”.(Risas). Yo dije, “Oh, maravilloso, maravilloso”. Él dijo, “Pero hay un problema. No sabía de esta película, y he programado hacer una gira en Estados Unidos con una pequeña orquesta griega y vamos a estar en eso por unos cuatro meses”. Él dijo, “Así que no podré estar contigo en la sala de edición”, lo cual llamamos una ‘sesión de ajustes’, donde nos sentamos y avanzamos en la película, y digo, “Deberíamos tener música aquí”, y él dice, “Me gustaría tratar algo aquí”, etc. Llamamos eso ‘ajustes’. Él dijo, “No puedo hacer una sesión de ajustes porque me voy pasado mañana…y no puedo estar en la sesión de grabación…” En otras palabras, él se iba, eso era todo (Risas). Y yo estaba encantado con eso, le dije, “No sé si lo conoces Mikis, pero tenemos un maravilloso arreglista aquí llamado Bob James.. Es básicamente un pianista de jazz, un músico brillante. Y sé que sentiría un gran honor por trabajar contigo. Así que puedo hacer la sesión de ajustes con Bob, y mientras él hace sus arreglos, estoy seguro de que Dino consentirá en enviarlo a cualquier ciudad donde estés con tu orquesta, y…” James también era un gran pianista, “Y él, estoy seguro, interpretará los arreglos, y tú…” Ves, y así fue la manera como solventamos eso. La razón por la cual yo quería tanto a Theodorakis era, número uno, que él venía de un tremendo éxito con la película de Jules Dassin, Nunca en Domingo, (tararea la música), eso era de él, yo sabía que él tenía un gran reputación en Europa, era un sólido alero izquierdo, y había cumplido una sentencia en la cárcel; (Risas) y sabía que Dino estaría muy agradado de que él participara en esta película. Y como ves, pienso que hay alrededor de catorce minutos de música en toda la película.
—A Pinewood Dialogue with Sidney Lumet
Traducción: Alfonso L. Tusa C.
Adivina quién viene a cenar (1967)
Detalles curiosos.
Official Sites:
Sony Movie Channel [United States]
Pais:
USA
Lenguaje:
Inglés
Fecha de estreno
12 de Diciembre de 1967 (USA)
Lugares de filmación:
Columbia/Sunset Gower Studios - 1438 N. Gower Street, Hollywood, Los Angeles, California, USA
-En la escena cercana al final donde Spencer Tracy expresa su memorable soliloquio, Katharine Hepburn puede ser vista llorando al fondo. Eso no era actuación:: ella sabía cuan gravemente enfermo estaba su amante de mucho tiempo y estaba afectada por la demostración de él acerca de cómo el amor verdadero prevalece a través de los años.
- Katharine Hepburn nunca vio la película completa, dijo que las memorias de Tracy eran muy dolorosas.
- Spencer Tracy falleció 17 días después de terminada la filmación.
- La escultura de bronce de tres pulgadas de Spencer Tracy que a parece en la película fue hecha por Katharine Hepburn y fue uno de los artículos incluidos en la subasta de sus bienes en 2004. El busto fue el artículo más solicitado y por el cual se pagó más dinero con 316.000 $, los estimados precedentes a la subasta estaban en la vecindad de los 3.000 – 5.000 $.
- Katharine Hepburn es la única estrella cinematográfica en ganar cuatro premios de la academia (hasta 2009) por sus papeles protagónicos en Morning Glory (1933), Guess Who’s Coming To Dinner (1967), The Lion in Winter (1968), y On Golden Pond (1981),
- El personaje de la hija de Katharine Hepburn es interpretado por la sobrina real de Hepburn, Katharine Houghton.
- Como Katharine Hepburn, el productor y director Stanley Kramer también puso a la orden su salario como garantía para aplacar la preocupación de los estudios cinematográficos por tener a Spencer Tracy en el elenco debido a su delicado estado de salud.
- Debido al estado de salud de Tracy, el lenco siempre trabajó con dos guiones, uno con Tracy, otro sin él. Típicamente, Katharine Hepburn llevaba a Tracy en la mañana, trabajaban hasta que ella decidía que él estaba muy cansado, entonces se iban. Sidney Poitier, quien había ganado el Oscar al mejor actor por Lilies of the Field (1963), estaba intimidado por trabajar con dos leyendas, y prefería actuar ante sillones vacíos.
- Esta película aún se exhibía en los cines cuando Martin Luther King fue asesinado. Originalmente había una línea de la película donde Joey (Katherine Houghton) le dice a la señora del servicio doméstico que viene otra persona a cenar, a lo cual Tillie (Isabel Sanford) responde, “¿Quién, el reverendo Martin Luther King? Cuando King fue asesinado, el estudio inmediatamente llamó a los cines que exhibían la película y les dio instrucciones de eliminar esa escena,
- Katharine Hepburn tuvo que poner su salario como garantía para efectuar esta película porque Spencer Tracy estaba tan enfermo que el estudio no confiaba en que estuviese vivo para el final de la película.
-Mr. Prentice (Roy Glenn) le dice a su hijo (Sidney Poitier) “En 16 o 17 estados ustedes violaràn la ley. Serán criminales”. Para el momento cuando las personas vieron la película ya eso no era verdad. El 12 de junio de 1967, la corte suprema de Estados Unidos declaró inconstitucionales las leyes anti integración racial en el caso Loving versus Virginia.
- Joey le dice a su padre, “Aun si tuvieras alguna objeción, no lo dejaría ir ahora, aunque fueras el gobernador de Alabama. Me refiero a si mamá lo fuese”. Joey hace esa corrección en referencia al hecho de que durante la filmación de esa película, el gobernador de Alabama era una mujer, Lurleen Burns Wallace, la esposa del varias veces gobernador de Alabama, notorio segregacionista, George Wallace.
- Esta película fue decisiva para terminar las consideraciones de mercadeo de cómo los trabajos cinematográficos que tenían temas y personajes afroamericanos eran rechazados por las audiencias de los estados sureños de Estados Unidos. En ese respecto, la película fue un éxito tan en todo Estados Unidos, incluyendo el sur, que el factor mercadeo nunca más fue considerado como impedimento para el estreno de cualquier película.
- Los anteojos de Spencer Tracy nunca tuvieron cristales durante la película.
- Este fue el debut cinematográfico de Katharine Houghton.
- Sidney Poitier nació el 20 de febrero de 1927; era solo 13 años menor que el actor que interpretó a su padre, Roy Glenn, quien nación el 3 de junio de 1914, y solo 7 años menor que la actriz que interpretó a su madre, Beah Richards, quien nació el 12 de julio de 1920. Sin embargo, Katharine Houghton, quien nació el 10 de marzo de 1945, estaba espaciada apropiadamente en edad con los actores que personificaron a sus padres, Spencer Tracy, nació el 5 de abril de 1900 (45 años mayor), y Katharine Hepburn nació el 12 de mayo de 1907 (38 años mayor).
-Spencer Tracy recibió una nominación póstuma al premio de la academia al mejor actor por la película “Adivina quien viene a cenar” (1967). Su viuda, Louise, asistió a la ceremonia en caso de que él ganara. Sin embargo el premio fue para Rod Steiger por “Al calor de la noche” (1967) la cual también protagonizó Sidney Poitier.
-Ocurrió el debut cinematográfico de Isabel Sanford, quien luego ganó fama como Louise en The Jeffersons (1975). En 1981, ella se convirtió en la primera mujer afroamericana en ganar un premio Emmy como actriz principal en una serie de comedia. Irónicamente, D’Urville Martin (Frankie) apareció en los dos pilotos de All In The Family como Lionel Jefferson.
- John le dice a Matt que Joey “siente que todos nuestros hijos serán el presidente de Estados Unidos y todos tendrán maravillosas administraciones”. En 1960, siete años antes que esta película fuese estrenada, un estudiante negro de economía llamado Barack Obama y una estudiante blanca de antropología llamada Ann Durham se conocieron, se enamoraron y se casaron. Como los personajes de John y Joey en esta película, Barack y Ann era una pareja interracial que se conoció en la University of Hawaii durante una época cuando las relaciones y matrimonios interraciales aún eran tabú o hasta ilegales en muchas partes del país. En 2008, el hijo de Barack y Ann Obama, Barack Obama, se convirtió en Presidente de Estados Unidos.
- Cuando el Dr. John Prentice (Sidney Poitier) hace la primera llamada de larga distancia a sus padres en Los Angeles, le pregunta a la operadora por el tiempo y el costo. Al final de la llamada él deja 2.20 $ sobre el escritorio para cancelar la llamada. Ajustada a la data de inflación US. CPI, la misma llamada en 2015 costaría 16.07 $.
- En algunas tomas se puede ver claramente la cabeza y manos de Katharine Hepburn temblando debido a una enfermedad hereditaria, cuando le sirve un trago al reverendo justo después de su segunda visita.
- Esta es la novena y última película que Spencer Tracy y Katharine Hepburn hicieron juntos.
- Nominada por Kathleen Turner como su película favorita de todos los tiempos en la encuesta AFI.
- Samantha Eggar y Mariette Hartley fueron consideradas para el papel de la hija interpretado por Katherine Houghton.
- Cuando Joey y John salen de la galería al comienzo de la película, el Cartright Hotel se ve brevemente al frente. Ese hotel permanece virtualmente intacto y está en 524 Sutter Street, San Francisco.
Curiosidades
Los temas de trivia a continuación pueden explicar puntos importantes del argumento de la película.
Cuando la película fue concebida y estrenada por el productor-director Stanley Kramer, uno de los cineastas más liberales de Hollywood, el matrimonio entre afroamericanos y caucásicos aún era ilegal en 14 estados. Hacia el final de la producción, la corte suprema de Estados Unidos generó su decisión en Loving v. Virginia. La decisión de Loving fue realizada el 12 de junio de 1967, dos días después de la muerte de Spencer Tracy, quien había interpretado a un blanco liberal quien acepta a regañadientes el matrimonio de su hija con un negro. En Loving, la corte decidió por unanimidad que las leyes de matrimonio anti-integración de razas eran inconstitucionales. En su opinión, el juez principal Earl Warren escribió, “El matrimonio es uno de lo “derechos civiles básicos del hombre’, fundamental para nuestra existencia y supervivencia. Negar esa libertad fundamental sobre una base tan débil como las clasificaciones raciales contenidas en estos estatutos, clasificaciones totalmente subversivas del principio de igualdad de la décimocuarta enmienda, es privar a todos los ciudadanos del estado de la libertad sin el debido proceso de ley. La décimocuarta enmienda demanda que la libertad de elección para casarse no sea restringida por la discriminación racial. Según la constitución estadounidense, la libertad para casarse o no con una persona de otra raza es potestad del individuo y no puede se infringida por el estado”. Interesantemente, Kramer se mantuvo en la línea del padre afroamericano interpretado por Roy Glenn, quien le dice a su hijo interpretado por Sidney Poitier, “En 16 o 17 estados ustedes estarán violando la ley. Serán Criminales”. Esto se debió debido a que Kramer notó que, a pesar de la modificación de la ley, la pareja debería enfrentar muchos prejuicios que requerirían de un gran amor para que su matrimonio sobreviviera, lo cual fue el mensaje que da el personaje de Tracy en una escena de ocho minutos que es el climax de la película. La escena que resume el tema de la película fue la última que Tracy filmó en la misma, y fue la última vez que aparecería en una película. Llevó una semana tomar la escena y al final, todo el elenco le dio una ovación de pie. Él falleció poco más de dos semanas despues al salir de un local de filmación por última vez.
Aunque todos los personajes son vistos sentados en la mesa del comedor mientras aparecen los créditos en la escena final, la cena no se ve por ninguna parte.
Traducción: Alfonso L. Tusa C.
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