jueves, 27 de abril de 2017

Kevin Durant y Russell Westbrook, quienes fuesen dúo dínámico alguna vez, ahora son adversarios feroces.

Scott Cacciola. 18-02-2017. New Orleans.- James Harden se alejó de la escena. “Ellos son dos hombres adultos”, Harden, el alero hacelotodo de los Rockets de Houston, dijo antes del juego de estrellas de la NBA la noche del domingo. “Tienen que arreglárselas entre ellos”. Se refería a la contínua pugna entre Kevin Durant y Russell Westbrook, dos antíguos compañeros de equipo quienes no parecen simpatizar mucho por estos días. Su fin de semana aquí ha sido una horrible reunión de dos íconos globales, ambos en el equipo de estrellas de la Conferencia del Oeste. Como tal, estaban obligados a compartir el oxígeno, aunque no mucho más, en Smoothie King Center. Quizás hubo un breve paréntesis en la victoria del Oeste 192-182 sobre el Este. En el primer cuarto, Westbrook salió de la banca para unirse a Durant sobre el tabloncillo. En su primera posesión juntos, Durant le lanzó una parábola a Westbrook para una clavada. Sus compañeros se levantaron en la banca, y pareció como si Westbrook y Durant eran capaces de coexistir, al menos por una noche. “Él lanzó un ‘sombrerito’”, dijo Westbrook. “Eso es todo lo que ocurrió. Solo lanzó un arco. Eso es baloncesto”. En un juego carente de verdadera competencia y de algo que remotamente se pareciera a una defensa, Anthony Davis de los Pelicans de Nueva Orleans estableció una marca de juego de estrellas con 52 puntos en el tabloncillo sede de su equipo, para romper la marca de Wilt Chamberlain, y fue nombrado jugador más valioso del juego. Westbrook anotó 41 puntos, y Durant tuvo 21 junto a 10 rebotes y 10 asistencias. Hubo una vez cuando Durant y Westbrook jugaban para los Thunder de Oklahoma. El verano pasado, Durant pasó a los Warriors de Golden State mediante la libre agencia. Eso no le agradó a Westbrook. De acuerdo a varias fuentes, la única comunicación entre ellos desde la partida de Durant hace muchos meses ocurrió hace más de una semana, cuando ambos se gritaron en el segundo tiempo de una victoria de los Warriors en Oklahoma City. Antes del juego del domingo, ellos demostraron por igual estar entrenados para evitar mencionar el nombre del otro. A Durant, por ejemplo, se le preguntó como hacía para manejar las distracciones potenciales. “ A veces es duro”, dijo él. “Pero cuando logras bloquearlas, es algo más fácil. No veas el asunto y no le prestes atención. Es un asunto que ustedes piensan que es importante, yo no pienso que sea importante para nada. Cuando lo ves de esa manera, es muy fácil para mí”. En cuanto a Westbrook, él rechazó hasta tocar el tema. Considere su respuesta a una pregunta acerca de compartir el camerino con Durant. “Hombre, ¿Sabes qué? La semana de la moda ha sido grandiosa”, dijo Westbrook. ¿Viste la semana de la moda? ¿Le prestas atención a la semana de la moda? Hay muchas cosas que lucen bien en la semana de la moda. Nuevas colecciones”. Un reportero intrépido intentó preguntar acerca de Durant. Deja eso atrás Russ. “Hombre, ¿Viste la ropa nueva de Public School? Es una locura”, dijo Westbrook. “Tenían artículos nuevos de Jordan con las iniciales M.J, hombre. He visto muchas cosas maravillosas en la semana de la moda, hombre. ¿Qué más me está faltando? Gucci. El material nuevo de Gucci es rudo. Muy buen material, hombre”. En la práctica pública sabatina en el Superdome, Westbrook y Durant guardaron su distancia. Cada vez que fue posible, lo cual fue a menudo, se mantuvieron en extremos opuestos del tabloncillo. El entrenador de los Warriors, Steve Kerr, quien dirigió a las estrellas del oeste, dijo que no tenía intención de organizar ningún tipo de reunión entre los dos para reconciliarlos. Ese no era su trabajo. “Lo único que me importa es que mis jugadores disfruten el fin de semana”, dijo Kerr. “Es un fin de semana intenso para ellos. Es un gran honor estar aquí. Quiero que todos estén cómodos y felices”. Debería notarse, por supuesto, que Durant y Westbrook están en vías de completar temporadas destacadas. Durant un alero de extremidades largas, promedia 25.8 puntos, 8.3 rebotes y 4.9 asistencias con los Warriors, quienes tienen la mejor marca de la liga con 47-9. También lanza para el mejor porcentaje de campo de su carrera con 53.9, producto de su propia superación, junto a la habilidad de sus compañeros de alto perfil para distraer la defensa rival. Durant y Stephen Curry se han convertido en un tándem particularmente dinámico. Siempre hay un período de ajuste cuando los jugadores empiezan a jugar juntos, dijo Kerr, especialmente cuando son superestrellas. Pero Curry y Durant son casi imparables cuando están juntos en el tabloncillo. Luego hay que agregar las situaciones que crea Klay Thompson desde la línea de los tres puntos. “Es sorprendente cuan rápido se ha adaptado el uno al otro”, dijo Kerr. “Pienso que Steph tenía que hacer el ajuste más grande, debido a que trataba de incorporar a KD a nuestro grupo. Pero pienso que eso cambió cuando Steph se dio cuenta que no tenía que hacer nada diferente. Tenía que ser él, ser agresivo y buscar anotar”. En ausencia de Durant, Westbrook ha llevado a los Thunder a una marca de 32-25. Promedia 31.1 puntos y 10.5 rebotes, ambos topes de su carrera, junto con 10.1 asistencias. Tiene oportunidad de convertirse en solo el segundo jugador en promediar un triple doble, doble figura en tres de las principales categorías estadísticas, en una temporada completa. Oscar Robertson lo hizo en la 1961-62. Con Durant, sin embargo, los Thunder eran contendientes al título. La temporada pasada, se fajaron con los Warriors hasta el séptimo juego de la final de conferencia, y probablemente hubieran avanzado para enfrentar a los Cavaliers de Cleveland en la final de la NBA de no ser por el heroísmo de Thompson al final de la serie. Sin Durant, los Thunder son candidatos con rendimiento por encima de lo esperado. Hay un chiste acerca de que les falta solo un jugador para regresar a la pugna por el título. (Ese jugador ahora vive en Bay Area). A pesar de todo, Westbrook dijo: “Estoy en un lugar maravilloso. Soy feliz. Me divierto”. Westbrook ya era un competidor antes que Durant se fuera. Pero la salida de Durant parece haber motivado más a Westbrook, todos sus logros son grandes. Y de esa manera, a pesar de sus marcadas diferencias, Westbrook y Durant permanecen conectados. Westbrook se alimenta de la rabia, la usa como combustible. Esa es su versión de la felicidad. Es la manera como se divierte. Traducción: Alfonso L. Tusa C.

miércoles, 12 de abril de 2017

Una novela olvidada alguna vez une a los lectores turcos en tiempos difíciles.

Tim Arango. The New York Times. 26-02-2017. Estambul.- Un turco joven llega a Berlín en la década de 1920. Al dejar a un lado su negocio de manufactura de jabones, pasa los días aprendiendo alemán y las noches leyendo libros, especialmente los rusos, y especialmente Turgenev. Explora los parques de la ciudad, sus calles amplias, sus museos y galerías de arte. Él busca algo “que me haga trastabillar”. Y lo encuentra una noche en una galería, donde se detiene extasiado frente a la pintura de una mujer joven vestida con un abrigo de piel. Día tras día, él regresa a mirar la pintura. Una noche, borracho y en medio de la calle, él ve a la mujer en carne y hueso. Su nombre es María, y la vida del joven hombre, Raif, se transforma. “Toda mi vida, había mantenido mi corazón cerrado”, dijo Raif. “Nunca había conocido el amor. Pero ahora, se habían abierto todas la s puertas a la vez”. Esa es la base de “Madonna in a Fur Coat”, una novela turca olvidada por algún tiempo, escrita hace casi 75 años que inesperadamente se ha convertido en éxito de ventas, rebasando en estos días, hasta a Orhan Pamuk, el ganador del premio Nobel de Turquía. Publicada en 1943 y escrita por Sabahattin Ali, un intelectual izquierdista encarcelado por sus escritos políticos (igual que sus contemporáneos bajo el gobierno actual), el nuevo hallazgo de éxito del libro se ha convertido en un punto raro de experiencia cultural común para un país profundamente polarizado. “Esa es una lectura, amada y sufrida por hombres y mujeres de todas las edades, pero principalmente por los adultos jóvenes”, escribió en The Guardian, Maureen Freely, quien tradujo el libro por primera vez al inglés el año pasado (con Alexander Dawe). “Y nadie parece capaz de explicar por qué”. Si el viviera hoy, Mr. Ali estaría sorprendido de ver que “Madonna” se ha convertido en éxitod e ventas, dijo su hija, Filiz Ali, 79, en una entrevista reciente en su apartamento de Estambul. (El libro ha vendido cerca de un millón de copias en los últimos tres años, de acuerdo a la ditorial, YKY, y fue publicado recientemente en inglés como un Penguin Classic), “Mi padre no le daba mucha importancia a ese libro”, dijo ella. “Y sus amigos le decían, ‘Sabahattin, no debiste haber escrito un libro romántico. No le hace bien a tu reputación’”. En erudito hombre de letras durante los primeros años de la república turca, y un devoto comunista, Mr. Ali escribía novelas, cuentos, poemas y artículos que lo llevaron reiteradamente a la cárcel. Los paralelos entre lo que él resistió como intelectual disidente y los juicios enfrentados por los escritores modernos turcos arrestados por oponerse al gobierno islamista actual, explican la nueva popularidad de Mr. Ali entre la comunidad turca. “Se están repitiendo las mismas cosas y peor”, dijo Ms. Ali, en referencia a los arrestos actuales de periodistas por oponerse al gobierno islamista actual del presidente Recep Tayyip Erdogan. Mr. Ali fue asesinado en circunstancias sospechosas en 1948, a los 41 años de edad, en una alcabala solitaria cerca de la frontera búlgara mientras trataba de huir hacia Europa. La muerte de Mr. Ali permanece, casi 70 años después, tan misteriosa como su recién hallada popularidad. Un contrabandista quien estaba “ayudando” a Mr. Ali a cruzar la frontera admitió haberlo asesinado y estuvo un corto período en prisión. Pero hay amplias sospechas, dijo su hija, de que en realidad fue asesinado por agentes de seguridad del estado después de ser interrogado. Ella cree que en alguna parte en las profundidades de los archivos del gobierno puede encontrarse la verdad. Con el éxito de “Madonna”, Mr. Ali ahora es una rara figura literaria quien es valorada con igual ardor por muchachas adolescentes e intelectuales. Sabri Gurses, un poeta y novelista turco, dijo que se conmovió cando supo que Mr. Ali realizaba una traducción alemana de la novela en verso de Alexander Pushkin, “Eugene Onegin”, cuando fue asesinado. Hoy en día, dijo él, cuando él ve a los jóvenes llevar un libro de “Madonna” por las calles de Estambul, se imagina que lo que muchos de ellos sienten por Mr. Ali es lo que el poeta ruso Mikhail Lermontov escribió acerca de Pushkin: “Él se levantó contra la opinión mundial, y como un héroe, cayó solitario”. El éxito repentino de “Madonna”, atribuído a los comentarios de boca a boca, al interés de algunos maestros turcos y a las redes sociales, se ha convertido en la oportunidad de Ms. Ali, tarde en su vida, para ayudar a reconciliar a los lectores turcos con su padre. Ella ha dado charlas en escuelas y conferencias para promover el libro, y dice que a menudo conoce personas jóvenes, incluyendo muchachos, quienes hablan con ella con lágrimas en los ojos. “A ellos les gusta un amor como ese”, dijo ella. “Madonna”, dijo ella, es en parte autobiográfica, porque Mr. Ali paso un tiempo durante su juventud en Berlin en la década de 1920. En una carta a un amigo que apareció después, se reveló que él tuvo una amistad allí con una mujer, María Pruder, lo cual inspiró la novela. En el libro, María es mitad judía, una revelación que pronostica lo que iba a ocurrir en Alemania. Ms. Ali dijo que su familia nunca ha tratado de ubicar a la María real o su familia. “Tal vez ella falleció en uno de los campos de la muerte”, dijo ella. En un país tan profundamente polarizado entre secularistas e islamistas, entre élites urbanas y pobreza rural, “Madonna” y el legado de Mr. Ali se han convertido en algo unificador, al menos para quienes aman los libros. Sevengul Sonmez, una editora e historiadora literaria, dijo que los lectores turcos quienes aman “Rome y Julieta” están “ahora leyendo María y Raif, como la moderna historia de amor imposible”. “Necesitábamos un clásico también”, dijo ella. “Pienso que los lectores han necesitado por mucho tiempo, un libro que pudiesen amar unánimemente. ‘Madonna in a Fur Coat’ emergió finalmente como territorio común”. Si uno pudiera mirar dentro de una sociedad desde los libros que leen sus ciudadanos, entonces una cosa que la popularidad de “Madonna” puede anotarse acerca de Turquía es la disposición, entre la juventud del país, para liberarse de los papeles tradicionales de los géneros y del machismo propuestos por el líder de Turquía, Mr. Erdogan. En el libro, los estereotipos de género están intercambiados. Raif aparece vulnerable y emocional, mientras María exuda independencia y falta de sentimentalismo para asuntos del corazón. Kaya Genc, un joven novelista y escritor turca, citó a Susan Sontag, la crítico, cuando habló de la resonancia de “Madonna”: “Lo más hermoso de los hombres viriles es algo femenino, lo más hermoso delas mujeres femeninas es algo masculino”. “Esto aplica perfectamente a ‘Madonna in a Fur Coat’ de Sabahattin Ali” dijo él. De vuelta en su apartamento, Ms. Ali recordó a su padre, calificándolo como un hombre con una mente rápida quien amaba la música y era devoto a su familia, quien hacía todo por ella y por su madre, y quien en su juventud fue un romántico empedernido. “Cuando él era joven, se enamoraba todo el tiempo”, dijo ella. Traducción: Alfonso L. Tusa C.

lunes, 10 de abril de 2017

Este domingo, Ron Hill hizo algo que no había hecho en el último medio siglo: Se tomó un día libre.

La seguidilla más larga de carreras llega a su final luego de 52 años y 39 días. Sarah Lorge Butler. Miércoles, 1 de febrero de 2017. Ron Hill, 78, tres veces olímpico por Gran Bretaña, terminó su seguidilla de carreras este domingo 29 de enero de 2017. La seguidilla, durante la cual, Hill corrió al menos una milla cada día, había durado 52 años, 39 días. Era la seguidilla de carreras conocida, más larga de la historia. En una declaración hecha por Streak Runners International, Hill, quien vive en Hyde, un pueblo a pocas millas al este de Manchester, escribió: “He estado teniendo problemas cardíacos y he esperado por algún tiempo tener el diagnóstico y el tratamiento para ese problema”. El 28 de enero, Hill escribió, que corrió su última milla de la seguidilla. “Luego de menos de 400 metros, me empezó a doler el corazón y el dolor empeoró y empeoró en los últimos 800 metros”, se lee en la declaración. “Pensé que podía morir pero completé la milla en 16 minutos y 34 segundos. No tuve otra opción detenerme. Lo hice por mi esposa, familia, amigos y por mí”. En 2014, cuando la seguidilla de Hill llegó a 50 años, le dijo a Runner’s World, “Espero vivir 100 años y todavía estar corriendo”. En los primeros 50 años de la seguidilla, él promedió más de siete millas por día, pera ha estado corriendo menos, alrededor de 25 millas por semana, en medio de su séptima década de edad. La seguidilla fue solo un pequeño logro en la carrera de Hill. Compitió en los Juegos Olímpicos de 1964, 1968 y 1972, su disgusto con su actuación en los 10.000 metros y la maratón de los juegos de Tokyo en 1964 fue lo que le inspiró a empezar la seguidilla. Hill ganó la maratón de Boston en 1970 en 2:10:30, la cual fue entonces la marca de la distancia. Fue la segunda persona en bajar de 2:10 en la maratón, al correr su mejor tiempo personal de 2:09:28. Tuvo marcas mundiales en 10 millas, 15 millas, y 25 kilómetros en carreteras. De acuerdo a SRI, Jon Sutherland, 66, de West Hills, California, tiene ahora la seguidilla más larga de días contínuos corriendo, con 47 años y 8 meses. Dijo que se sentía entristecido por el fin de la seguidilla de Hill. “Soy un seguidor a distancia”, dijo Sutherland de Hill. “Él fue un pionero increíble, una de las figuras más importantes en la evolución de las carreras”. Sutherland dice que Hill tuvo una seguidilla de cuatro años antes que empezaran los 52 años de carreras contínuas. Sutherland no está seguro de si será capaz de continuar corriendo para acercarse a la marca que estableció Hill. “2016 fue mi peor año”, dijo Sutherland. Plagado de lesiones molestas, él corrió 1.066 millas en 2016, y en 20 días, corrió el mínimo de una milla requerido para mantener la seguidilla. (Usualmente corre tres millas diarias a un paso de entre nueve y diez minutos por milla). “La seguidilla no me motiva mucho”, dijo él. “Me sentía mas motivado por las competencias cuando era más joven. Hago esto porque lo disfruto. Trato de no pensar en eso”. Jim Pearson, 72, de Marysville, Washington es segundo en la lista actual de la seguidilla (46 años, 11 meses). Stephen De Boer, 62, de Rochester, Minnesota, es actualmente tercero con 45 años, 7 meses. En un correo electrónico dirigido a Runner’s World, dijo que no pretende tratar de establecer la seguidilla más larga, aunque es más joven que quienes están delante de él en la lista. “Correr todos los días es algo interno, no importa quien esté delante o detrás de mí”, escribió él. Traducción: Alfonso L. Tusa C.

jueves, 6 de abril de 2017

El Tipo más Valiente que Conozco.

Cam Ward. Portero/Carolina Hurricanes. The Players’ Tribune. 12-07-2016. Me estremecí con un juego recientemente. Fue brutal. La peor parte es que fue en mi propia casa. Mi hijo Nolan tiene cinco años de edad y le gusta jugar minihockey conmigo. Si fuese por su cuenta, jugaría todos los días. Tenemos una rutina. Antes de empezar cada juego tenemos que escoger nuestros equipos. Él tiene esos pequeños imanes con los logos de NHL, y coloca el enfrentamiento del día en la pizarra. Él siempre escoge de primero. Usualmente escoge a los Stars de Dallas. Le gustan los Stars por alguna razón. Pero esta vez, escogió el equipo de papi. “¡Yo soy los Hurricanes! dice él. Le digo, “Está bien amigo. ¿Quién es el portero titular esta noche?” “Hmmm…Cam Ward”. Papi empieza el juego. Bien. El juego es el primero de cinco, y él hace comentarios sobre la marcha todo el tiempo, como si fuera el narrador del juego. Las repeticiones de video son obligatorias. “¡Skinner tiene el puck…dispara…y anoooooota!” Él me supera 4-1, cuando de pronto yo anoto un punto para disminuir la ventaja hasta 4-2. ¡Él pide tiempo! “Ah, ah”, dice él, “Los Hurricanes van a hacer un cambio de portero” Yo digo, “¿Qué?” “Si, vamos a hacer un cambio. Eddie Lack va a entrar”. “Pero amigo…estás ganando 4-2. No entiendo. ¿Por qué sacas a Cam Ward?” “Lo siento, el entrenador quiere hacer un cambio”. “Pero, papi estaba…” “Lack va a jugar”. Él empieza a hacer estiramientos como si fuese Eddie, calentando al salir de la banca. Papi se estremeció. Con una ventaja. ¿Qué hago? Digamos que papi tuvo una pequeña recuperación para ganar 5-4. Lo siento, Eddie. Para muchos papas, este tipo de momento es casi rutina. Muchos niños adoran jugar minihockey. Muchos niños crecen haciendo su propio jugada a jugada. Pero para mí, el hecho de poder oir a mi hijo cantar los goles es algo que nunca daré por sentado. * Uno de los días más felices de mi vida fue cuando nació mi hijo. Día de acción de gracias de 2010. Yo estaba por las nubes. Pero no tenía idea de la montaña rusa emocional que estábamos a punto de empezar. Mi esposa Cody, me llamó del hospital el día después que Nolan nació. Estábamos en Boston en una gira. Pude intuir por el tono de su voz que algo no estaba bien. Ella me explicó que Nolan había fallado la prueba de audición de recién nacido en el hospital, pero el médico dijo que eso ocurre todo el tiempo. “Podrían ser los fluidos”, dijo él. Cuando un recién nacido falla su prueba inicial de audición, automáticamente se hace una cita de seguimiento. Mi esposa llevó a Nolan al consultorio del audiólogo pediatra, y trató de mantenerse positiva. Ellos sometieron a Nolan a una serie de pruebas, y el médico pareció optimista. Despues que terminaron, ellos le dijeron, “Todo está muy bien. Vaya a casa y le avisaremos si se presenta algo”. Pero tan pronto como llegó a casa, llamaron del consultorio. Mi esposa es la única que puede describir lo que ocurrió a continuación. Cody “Hola, Mrs. Ward. ¿Puede por favor traer de vuelta a Nolan? Queremos hacerle unas pruebas adicionales”. Aún en ese momento, yo todavía pensaba que todo iba a salir bien. Cuando lo llevé de regreso, la audiólogo se detuvo a mitad de una de las pruebas y me lanzó una mirada. Ella dijo unas palabras que nunca olvidaré. “¿Quiere llamar a su esposo?” Yo dije, “Um, él está en plena práctica de hockey”. “Ya veo. Pero tal vez sería mejor que él estuviera aquí”. “Él está..él está en una práctica de hockey. No puede…” Casí me derrumbé. Yo sabía. Lo supe al segundo cuando me lo decía. Cam Termina la práctica y recibo una llamada. Mi esposa decía algo que yo no podía entender. Me decía que Nolan había fallado en otra revisión. Nuestro hijo era sordo. Yo estaba anonadado. Una especie de incredulidad. No lo aceptaba. Llevamos a Nolan al UNC Medical Center para algunas pruebas adicionales y confirmaron que él era “profundamente sordo”. No oía para nada. Y no podía entender como eso era posible. El embarazo había sido normal. El parto había sido perfecto. Nada de antecedentes de incapacidad en ambas familias. Cody y yo nos hicimos pruebas genéticas y todas resultaron negativas. Nos dijeron que se trataba de una mutación genética espontanea. Aun después del diagnóstico, yo no lo creía. Hubo momentos cuando Nolan dormía en su cuna, y yo me paraba detrás de él y aplaudía fuerte cerca de sus oídos. Nada. Aplaudía tan fuerte como podía, esperando ver algun tipo de reacción, esperando que él pudiera oírme de alguna manera. Pero él seguía durmiendo. Eventualmente, luego de más citas y pruebas de las que pueda contar, el especialista del UNC nos dijo que deberíamos considerar los implantes cocleares para Nolan. ¿Implantes cocleares? Nunca antes había oído ese término. El doctor explicó que son dispositivos médicos electrónicos que proveen de señales sónicas al cerebro. Serían implantados en el oído interno de Nolan. Afuera, un “procesador” sería adosado a un lado de su cabeza con un magneto. Imaginelo como un micrófono que recoge todos los sonidos externos, y transmite una señal a los electrodos en la coclea, lo cual estimula al nervio auditivo. Toda esa terminología hacía girar mi cabeza. Todavía lo hace. Pero estábamos dispuestos a tratar cualquier tecnología que pudiese ayudar a nuestro hijo oírnos decirle que lo amábamos. Sin embargo eso podía ser duro. Nolan tenía 9 meses y medio cuando se realizó la cirugía para el implante del lado derecho. Nada puede prepararte para ver a tu bebé pasar por una cirugía mayor. Pero todo salió bien, y lo llevamos a casa desde el hospital el mismo día. La pregunta era, ¿Dónde deberíamos fijar nuestras esperanzas? Había mucha incertidumbre. Hay que tener en cuenta que Nolan no había oído ni un sonido en los primeros nueve meses y medio de vida. Mi esposa… no puedo decir todo lo que ella había hecho por Nolan. Yo había estado lejos jugando hockey y ella había trabajado con él todos los días. Ella se sentaba con él y le repetía cada sonido. Yo no tenía idea de lo laborioso que es enseñar a hablar. Hay muchas cosas del desarrollo del bebé que se dan por sentado. Tienes que hacer las inflexiones en tu voz para que él consiga las diferentes entonaciones y sonidos. Cada sonido era “ba-ba-ba, boo-boo-boo, bee-bee-bee”. Tuvimos que llevar todo al nivel más básico para reconstruir todo. Pero Nolan siguió trabajando, y entonces un día, después que había cumplido dos años, recibí el mejor mensaje de texto de mi vida. Estábamos de gira (por supuesto), y yo estaba en el hotel cuando mi esposa me envío un video de Nolan en su silla alta. La podía oir fuera de pantalla, extremadamente excitada. “¿Qué dijiste Nolan? ¿Qué dijiste? “I wuv you”. Caramba. Caramba. “¡Dilo otra vez! ¿Qué dijiste Nolan?” “I wuv you”. Cuando recibí ese video, yo estaba muy emocionado. Como jugador de hockey, estás mucho tiempo lejos de tu familia, y desafortunadamente te pierdes los grandes momentos como ese. Ser capaz de experimentar ese momento, aun a través del teléfono en la habitación del hotel, fue indescriptible. Casi un año antes. Nolan no podía oírnos decirle que lo amábamos. Ahora, el lo decía de vuelta. Yo no veía el momento de regresar a casa y verlo en persona. Pronto, él añadió más palabras, y yo recibía videos como este todo el tiempo. De todas formas, nos tomó algun tiempo acostumbrarnos a ver a Nolan con su procesador puesto. Como padre, me preocupaba por él. ¿Se acostumbraría? ¿Sería capaz de usar un casco sin que se le cayera el procesador? ¿Podría saltar a una piscina con el procesador puesto? El punto es, que esas eran solo mis inseguridades. Nolan no tiene idea de que él es diferente de los demás, porque no lo es. Ahora tiene cinco años de edad y destaca en la escuela. Está leyendo y hablando a nivel de su edad biológica. Tiene un grupo de grandes amigos. Hay preguntas como, “¿Qué es eso que tienes en la cabeza?” Y él, simplemente responde, “Ese es mi procesador. Me ayuda a oir”. La temporada pasada, Nolan y mi esposa estaban viendo el juego de mi equipo por TV, parado sobre el sofá, se volteó y le dijo, “Voy a ser como papá cuando crezca”. “Ella dijo, “Ah, ¿si? ¿Vas a ser portero de hockey?” “Si, voy a ser portero de los Hurricanes. Pero no voy a tener mi procesador. Porque papá no tiene uno. Así que no tendré uno”. Por más que sea difícil, es en esos momentos cuando le tienes que recordar, que siempre va a tener su procesador. Mi esposa hizo un gran trabajo explicándoselo. “Bien, ¿Sabes que mami tiene que usar anteojos para ver? Así mismo tú tienes que usar tu procesador para oir. No es nada del otro mundo. Solo los necesitamos”. Él hizo una pausa para asimilarlo por un segundo. Entonces dijo, “Ah, está bien”. Y regresó a ver el juego. Nuestras emociones pueden decrecer por momentos, pero él sigue adelante. En realidad, él es mucho mejor que yo para avanzar entre sus obstáculos. Yo todavía me molesto a veces, y pienso, “¿Por qué Nolan?” Me duele por dentro cada vez que lo veo en dificultades. El día que fuimos a comprar su primer casco de hockey, fue uno que habíamos esperado mucho, fue un día que debió haber sido un momento grande, feliz para nosotros. Pero esa excitación terminó en lágrimas cuando no pudimos adaptar su procesador al casco. Al final, cortamos algo de goma espuma del casco y logramos hacer el ajuste. Aunque me duele verlo molesto, guardo esos sentimientos en mi interior. Él cree que puede tratar de hacer todo, y yo también. El hockey es su felicidad. Lo ama. Su momento favorito es ir al camerino conmigo después de una práctica o de un juego. El mío también. El habla con los jugadores y piensa que es divertido. Luego va a la sala de ejercicios y hace su rutina ninja. “Amigo, es hora de irnos”. “Pero papá, necesito ejercitarme”. Eso no tiene precio. Durante nuestros juegos en casa, Nolan está en la esquina de la barrera de plexiglás durante los calentamientos. Le gusta eso, porque siempre recibe la señal del puño bombeado de su héroe, Jeff Skinner. (Él usa su camiseta de Skinner en la mayoría de los juegos. Esa o la de Justin Faulk. De vez en cuando incluye la camisetad de papá en la rotación. Pero definitivamente soy su número 3). Por un breve periodo, Nolan pensó que mientras más alto fuese el número de la camiseta, mejor era el jugador. Que el equipo le daba los números más altos a los mejores jugadores. Si jugábamos ante los Capitals, él decía, “Papá ¿Cómo van a hacer para ganar esta noche? El portero de ellos tiene el número 70. Tú eres el 30. Él es muy bueno”. Es cómico. Llegaba a casa luego de un juego y Nolan me decía, “Papi, necesitas tratar más duro de parar el puck”. Gracias, amigo. Copiado. Para el ultimo juego de la temporada de este año, Nolan me sorprendió al hacerme una pancarta. Miré hacia su lugar habitual en la esquina, y veo ese cartón grande que dice, VAMOS PAPÁ. PARA TODOS LOS PUCKS. Observar a Nolan y notar su amor por el juego me lleva de vuelta a cuando yo tenía su edad. Yo adoraba estar con mi papá en el camerino, aunque solo fuera una liga de hockey recreativo. Yo pensaba que era la major. Mientras crecía, mi papa siempre me dijo, “Mientras más te diviertas, lo harás major”. Él la llamaba su regla dorada. Para ser honesto, a veces esa puede ser una regla difícil de cumplir si te atrapa la tensión de tu trabajo. Pero Nolan, con solo cinco años de edad, ahora es el ejemplo más grande de la regla de mi papá. Los niños son resilientes. Viven el momento. Solo disfrutan. Nolan me recuerda eso cada vez que lo miro. Cada vez que llegaba a casa después de un juego, Nolan me decía, “Papi, necesitas tratar más fuerte de parar los pucks”. El mes pasado, él me dio otro recordatorio de lo fuerte que es. Con Nolan a punto de empezar el kindergarten este otoño, decidimos que era tiempo de hacerle el segundo implante en su oído izquierdo. Lo único que puede ser difícil para Nolan es una habitación grande o las multitudes de personas. Debido a que solo tenía un procesador en el oído derecho, podía oírte, pero no siempre podía decir desde donde venía el sonido. Esperábamos que un segundo procesador le facilitara ubicar los sonidos. Pero, por supuesto, eso implicaba otra cirugía, Esta vez era diferente. Él ya no era un bebé. A los cinco años de edad entendía mejor lo que iba a suceder. Estaba a punto de empezar la cirugía, cuando de pronto entró en pánico. En medio de ese momento difícil, mi esposa tuvo que entrar al quirófano para ayudar a calmarlo, mientras lo anestesiaban. Ni me puedo imaginar viendo eso. Pensamos si él nos iba a odiar por eso, si estaba sintiendo mucho dolor. Despues de unas horas, el cirujano salió y nos dijo que todo había salido de maravillas. Cuando fui a ver a Nolan, él despertó, ¿saben lo que hizo? Preguntó por su iPad. Quería jugar con su juego de Team Canada Table Hockey. Increíble. Él estaba de vuelta en sus juegos de hockey, de vuelta en su felicidad. Si hubiera sido yo, hubiera estado quejándome y sollozando por semanas. Cuando te enteras por primera vez de que tu hijo es sordo, temes que nunca será un “niño normal”. Pero lo que ha sido tan asombroso de esta montaña rusa en la que hemos vivido en los pasados cinco años es que Nolan no es solo un niño normal. Es mucho más que eso. Nunca se queja. No se ve cómo alguien diferente. Es el tipo más valiente que conozco. Cuando renové con los Hurricanes de Carolina el mes pasado, Cody y yo estábamos muy felices. Para ser honesto, la idea de ir a la agencia libre y tener que mudarnos a otra ciudad era muy preocupante. Para mí, es mucho más que firmar con un equipo. Raleigh se ha convertido en mi hogar, quiero estar aquí, ganar aquí, y ahora. Nolan necesita estar aquí. Los médicos de UNC me enseñaron la habilidad de hablarle a mi hijo y hacer que me escuchara, a acercarme a él en la noche y conversar de como había sido su día. No puedo expresar cuanto le debemos a esos médicos y su discurso terapista, tenerlos en nuestro patio con Nolan es muy importante. Agradezco mucho, que los Hurricanes tuvieran confianza en mis habilidades y quisieran traerme de vuelta. Así que después que la negociación se hizo oficial, mientras preparaba a Nolan para irse a la cama, decidí decirle la noticia. Cuando Eric Staal fue cambiado la temporada pasada, eso fue un gran reto, porque Nolan se había hecho muy amigo de los hijos de Eric. Tuvimos que decirle que se estaban mudando para Nueva York. Así que Nolan está familiarizado un poco con el lado de las negociaciones del hockey. Me senté en su cama y dije, “¡Adivina que amigo! Papi tuvo una conversación con el equipo hoy, y tenemos buenas noticias”. Él dijo, “¿Nos quedamos en Carolina?” “Si amigo, nos quedamos”. “¡Que bueno!” Pausa dramática. Entonces me dice… “Pero después que terminemos de jugar en Carolina, ¿Podemos jugar para los Stars?” Cam Ward. Colaborador. Traducción: Alfonso L. Tusa C.

miércoles, 5 de abril de 2017

Yevgeny Yevtushenko, El Poeta Quien Agitara una Generación de Soviets, fallece a los 83 años de edad.

Raymond H. Anderson. 01 de abril de 2017. The New York Times. Yevgeny Yevtushenko, un poeta aclamado internacionalmente, con el carisma de un actor y el instinto de un político, cuyo verso desafiante inspiró a una generación de jóvenes rusos en su enfrentamiento con el estalinismo durante la guerra fría, falleció esta sábado 01 de abril en Tulsa, Okla., donde había estado cumpliendo labores docentes por muchos años. Su muerte, en un hospital, fue confirmada por un amigo cercano, Mikhail Morgulis, con la agencia de noticias TASS, reportó Radio Europa Libre. Se dijo que él había sido ingresado cerca de la medianoche del viernes en “condición grave”, pero la causa de la muerte no fue especificada. Se indicó que su esposa, Maria Novikova, y sus dos hijos, Dmitri y Yevgeny, estaban con él cuando falleció. Los poemas de protesta de Mr. Yevtushenko, a menudo declamados con gestos enfáticos a miles de admiradores emocionados en plazas públicas, estadios deportivos y salas de lectura, capturaron las emociones de los jóvenes rusos, esperanza, miedo, rabia y anticipación eufórica, mientras el país el país tenía dificultades para liberarse de la represión durante los años confusos y tensos posteriores a la muerte de José Stalin en 1953. En solo 1961, Mr. Yevtushenko hizo 250 lecturas de poesía. Se convirtió, como los describiera un escritor, “en un león grisáceo de las letras rusas”, quien en sus años finales, enseñó, ofreció charlas en universidades estadounidenses, incluyendo la University of Tulsa, y se ganó la admiración de generaciones exitosas antes y después del colapso de la Unión Soviética. Pero fue como un joven siberiano alto y atlético de espíritu poético y político que él estableció su nombre en la literatura del siglo 20. Él fue el más conocido de un pequeño grupo de poetas y escritores rebeldes que llevó esperanza a las jóvenes generaciones mediante una poesía que atacaba a los líderes totalitarios, los fanáticos ideológicos y los burócratas tímidos. Entre otros estaban Andrei Voznesensky, Robert Rozhdestvensky y Bella Akhmadulina, la primera esposa de Mr. Yevtushenko. Mr. Yevtushenko trabajaba principalmente dentro del sistema, sin unirse a los rangos de los disidentes literarios. Al detenerse cerca de la línea entre el desafío y la resistencia, él disfrutó de una aprobación oficial que los disidentes más vehementes llegaron a resentir. Mientras ellos eran enviados al exilio o a los campos de trabajo forzado, Mr. Yevtushenko recibía premios de estado, sus libros eran publicados regularmente, y le era permitido viajar al exterior, convirtiéndose en una superestrella literaria internacional. Algunos críticos tenían dudas acerca de su sinceridad como opositor de la tiranía. Algunos lo llamaban el “favorecido”. Algunos enemigos sugerían que él fingía protestar mientras servía a la policía de seguridad del régimen o a las autoridades comunistas. El poeta exilado Joseph Brodsky dijo una vez de Mr. Yevtushenko, “Él lanza piedras solo en las direcciones sancionadas y aprobadas oficialmente”. Los seguidores de Mr. Yevtushenko rechazaban tales ataques, señalando todo lo que hizo por oponerse al legado de Stalin, una animosidad impulsada por el hecho de que sus dos abuelos habían perecido en las purgas de Stalin en la década de 1930. Él fue expulsado de su universidad en 1956, por defender una novela vetada “Not By Bread Alone” (“No solo por Pan”) de Vladimir Dudintsev. Rechazó unirse a la campaña oficial contra Boris Pasternak, el autor de “Doctor Zhivago” y ganador del premio Nobel de literatura de 1958. Mr. Yevtushenko denunció la invasión de Checoslovaquia en 1968; intercedió ante el jefe de la KGB, Yuri V. Andropov, a favor de otro premio Nobel, Aleksandr Solzhenitsyn; y se opuso a la invasión soviética de Afganistán en 1979. Mr. Yevtushenko escribió miles de poemas, incluyendo algunos cortos que él apuraba, admitía, solo para marcar la ocasión. Algunos críticos cuestionaron la calidad literaria de su trabajo. Algunos escritores resentían su brillantez, su laboriosidad, su éxito. Pero tanto sus rivales como sus amigos reconocían que algunos de sus poemas habían entrado a los anales de la literatura rusa como obras maestras de consciencia e internalidad. Escritos y leídos a las multitudes en momentos críticos, los poemas de Yevtushenko como “Stalin’s Heirs” (“La Herencia de Stalin”) capturaron el espíritu de una nación en una encrucijada. En Rusia, a veces los escritores podían ser más influyentes que los políticos. Pero también podían ser rechazados severamente si ofendían, como hizo Pasternak con su novela “Doctor Zhivago” y Solzhenitsyn con “The Gulag Archipelago” (“El Archipiélago de Gulag”) y otros trabajos. Combatir el antisemitismo El antisemitismo permanecía en el Kremlin después de la muerte de Stalin. Por un lado, los oficiales nerviosos hacían esfuerzos por levantar un monumento en BabiYar, un barranco cercano a Kiev, Ucrania, donde miles de judíos fueron abaleados y enterrados en fosas comunes en 1941 por los alemanes invasores. La razón que argüía el Kremlin para resistirse al monumento era que los alemanes habían abaleado a otras personas también, no solo judíos. Mr. Yevtushenko asumió el tema en 1961 mediante un verso que impresionó a muchos rusos y le ganó aclamación mundial. El poema “BabiYar”, compuesto luego de una visita al barranco, incluía estas líneas: No hay monumentos en BabiYar Pero el precipicio es como una lápida rústica Eso me horroriza. Hoy, soy tan viejo Como los judíos. Ahora me parece, Que también soy judío. En alusión a las masacres que aparecían por intervalos a través de los siglos, Mr. Yevtushenko continuó: Me parece, Que soy un muchacho en Byelostok. La sangre fluye, Se riega en el piso. Los líderes de la horda de la taberna están furiosos Huelen a vodka y cebolla. Pateado a un lado por las botas, permanezco indefenso. Le ruego en vano a los brutos. Mientras las voces rugen: “¡Maten a los judíos! ¡Salven a Rusia!” En un pais dominado por el mito marxista, ostensiblemente libre de tolerancia, “BabiYar” tocó las fibras del liderazgo, y fue enmendado para satisfacer las objeciones oficiales. Aún así, el poema impactaba las audiencias. Cada vez que Mr. Yevtushenko recitaba el poema en eventos públicos, era recibido con un silencio impactante seguido de ovaciones de trueno. Él escribió una vez que había recibido 20.000 cartas aclamando a “BabiYar”. Dmitri Shostakovich compuso su Décimatercera Sinfonía inspirado en las líneas de ese y otros poemas de Yevtushenko. Pero a Mr. Yevtushenko no le fue permitido hacer lecturas públicas del poema en Ucrania hasta la década de 1980. “Stalin’s Heirs”, publicado en 1962, también agitó a los rusos, al aparecer en una época cuando temían que el estilo represivo estalinista pudiese regresar al país. Este poema solo fue publicado después de la intervención de Nikita Khrushchev, el líder semi-liberal del partido quien estaba entonces involucrado en un conflicto de poder con los conservadores, al presionar por la liberación cultural. Stalin había sido condenado el año anterior por haber sido un tirano. El poema apareció en Pravda, el periódico oficial del partido comunista, y causó sensación. “Stalin’s Heirs” empieza con una descripción del cadáver de Stalin siendo trasladado en su urna fuera del mausoleo de la plaza roja para enterrarlo cerca del muro del Kremlin. Apretando con rabia Sus puños embalsamados, Él miraba a través de una rendija, Como si pretendiera estar muerto, Quería recordárselo a todos Quienes lo trasladaban. Mr. Yevtushenko siguió: Me vuelvo hacia nuestro gobierno con una solicitud: Doblar, Y triplicar la guardia de la tumba Para que Stalin no se vuelva a levantar, Y con Stalin el pasado. Y más adelante el punto principal del poema: Lo sacamos Del mausoleo, Pero ¿como sacamos a Stalin De la herencia de Stalin? Para el momento cuando llegaron los cambios democráticos al sistema comunista soviético a comienzos de la década de 1990, Mr. Yevtushenko había emergido en el sistema reformista para convertirse en miembro del parlamento y secretario del sindicato oficial de escritores soviéticos. En ese trayecto recibió altos honores, fue publicado en los mejores periódicos y fue enviado al extranjero como enviado de buena voluntad. También resistió el abuso, los celos, la frustración y la censura. Una vez bromeó con que los censores de Moscú eran sus mejores lectores, los más expertos en captar sus ideas y sentires. Yevgeni Aleksandrovich Gangnus nació el 18 de julio de 1933, en Zima Junction, una estación maderera remota del ferrocarril trans-siberiano en la región de Irkutsk de Siberia, cerca del lago Baikal. Su padre, Aleksandr Rudolfovich Gangnus, era geólogo, igual que su madre, Zinaida Ermolaevna Evtushenko, quien se convirtió en cantante. Sus padres se divorciaron, y el muchacho tomo el apellido de su madre. Yevgeny pasó los primeros años de su infancia con su madre en Moscú. Cuando las tropas alemanas llegaron a Moscú a finales de 1941, la familia fue evacuada a Zima y se quedó allí hasta 1944. Mientras crecía, Yevgeny acompañaba a su padre en expediciones geológicas a las regiones salvajes de Kazakhstan y las montañas Altai, donde su padre le recitaba poesía. El muchacho aprendió a valorar la naturaleza y la literatura. También tenía inclinación por el deporte. A los 16 años de edad fue seleccionado para unirse a un equipo profesional. Pero el éxito literario repentino lo llevó a abandonar esa ambición. Pronto sus poemas empezaron a aparecer en periódicos, revistas populares y publicaciones mensuales literarias. Las autoridades elogiaron sus primeros poemas, a los cuales él después llamó “trabajo complaciente”, y fue admitido en el elitesco Gorky Literary Institute y en el sindicato de escritores soviéticos. Pero después de la muerte de Stalin, Mr. Yevtushenko casi fue atropellado a muerte en una estampida del funeral en Moscú, su trabajo tomó una dirección contraria al Realismo Soviético, el estilo artístico establecido por el oficialismo, por lo cual reflejaba un nuevo pensamiento acerca de la responsabilidad individual y el estado. Los temas de la represión del estado y el miedo habían sido recurrentes en su trabajo a través de los años, pero también empezó a introducir asuntos personales en su trabajo, como lo hizo con su largo poema “Zima Junction”, acerca del retorno a su pueblo natal en 1953. Publicado en 1956, este fue seguido por más volúmenes de poesía que rechazaba conformarse con las formas aprobadas de expresión. Después de alabar “Not by Bread Alone”, la caustica novela de Dudintsev de 1956, acerca de la vida soviética, Mr. Yevtushenko fue expulsado del instituto literario. Pero hacia finales de la década de 1950, él había publicado siete volúmenes de poesía y le permitieron leer su trabajo en el extranjero. En los próximos años se hizo familiar en los círculos literarios de Europa oriental y occidental, Estados Unidos, Cuba, Africa oriental y Australia. De hecho, se empezó a desarrollar un culto virtual en torno a él después que la revista Time publicó su retrato, de “hombre joven enojado”, en su portada de abril de 1962 e imprimió un articulo laudatorio acerca de él como líder espiritual de una Rusia cambiante y liberadora. Por su parte, Mr Yevtushenko reiteró que los escritores estadounidenses habían sido importantes en su desarrollo literario. Más adelante ese año, él intercambió palabras con Khrushchev en una exhibición de arte contemporáneo en Moscú. Mr. Khrushchev, quien tenía gustos simples y enfrentaba serios retos políticos, entró en cólera contra el abstraccionismo e hizo amenazas de coerción. Medidas neoestalinistas contra el arte moderno, la literatura y la música siguieron a la confrontación. Mr. Yevtushenko mantuvo un seguimiento leal, al escribir casi de todo lo importante en casa y afuera. Rindió tributo al senador Robert F. Kennedy y al reverendo Dr. Martin Luther King Jr., después que fueran asesinados. Homenajeó a Allison Krause, uno de los estudiantes muerto a tiros en Kent State University durante una protesta contra la guerra de Vietnam. Desaprobó a John Steinbeck por no protestar la guerra de Vietnam. En el poema “Tanques Rusos en Praga”, criticó la invasión del bloque soviético a Checoslovaquia en 1968. (El poema circuló de mano en mano, no fue publicado hasta 1990). A mediados de la década de 1980, Mr. Yevtushenko defendió la campaña del glasnot por la “apertura” promovida por el líder soviético Mikhail Gorbachev. En un discurso ante el sindicato de escritores, Mr. Yevtushenko atacó los privilegios, la censura y la distorsión de la historia. Fue miembro del primer Soviet Supremo electo libremente, el parlamento vigente del país. Él desafió públicamente los intentos conspirativos de la línea dura conservadora para tomar el poder en 1991. El intento de golpe, que depuso temporalmente a Mr. Gorvachev, envió una onda de choque a través de Rusia y el mundo. Mr. Yevtushenko recibió después una medalla como “Defensor de Rusia Libre”. El conflicto se convirtió en inspiración para una novela, “Don’t Die Before You’re Dead”. (“No Mueras Antes de Estar Muerto”). Dolor y Felicidad Mr. Yevtushenko no escribía solo de asuntos políticos y sociales. Compuso versos de amor, naturaleza, arte, viajes y los distintos dolores y felicidades de la vida. En 1956, por ejemplo, mientras estaba casado con Bella Akhmadulina, escribió “My Beloved Will Come”. (“Mi Amada Vendrá) Mi amada vendrá Y me tomará en sus brazos. Notará los cambios Y entenderá mis miedos. A través de la caida negra, del brillo nocturno, Al olvidar con rapidez cerrar la puerta del taxi, Ella correrá hacia el escalón decrépito Llena de alegría y deseo Entrará empapada Sin tocar. Tomará mi cabeza en sus manos, Y su abrigo de piel azul resbalará Felizmente desde el asiento hasta el piso. Mr. Yevtushenko tuvo cuatro matrimonios. Se casó con Galina Semenova despues que él y Bella Akhmadulina se divorciaron. Su tercera esposa, Jan Butler, tradujo al inglés la poesía de él. Su viuda, Ms. Novikova, con quien se casó en 1986, ha enseñado ruso en una escuela preparatoria cercana a la University of Tulsa. Además de sus hijos Alexander y Dmitry, él tuvo otros tres hijos, Yevgeny, Pyotr y Anton. La lista completa de sobrevivientes no estuvo disponible de inmediato. Mr. Yevtushenko mantuvo hogares en Rusia y Estados Unidos y enseñó en la University of Tulsa, la City University of New York y la New York University (donde un estudiante lo recordó vestido con trajes plateados “caminando hacia adelante y hacia atrás en el frente del salón de lectura” mientras leía sus poemas en “ruso en voz alta”). Viajó ampliamente, leyendo su poesía, dictando charlas, enseñando y dando discursos que desbordaban multitudes en las universidades. A través de todo eso, Mr. Yevtushenko se reconocía como un patriota. En “Don’t Die Before You’re Dead”, él resumió sus sentimientos ambivalentes de triunfo, nostalgia y remordimiento como sobreviviente del difunto sistema soviético. En un poema de la página final, “Goodbye, Our Red Flag,” (“Adiós, a Nuestra Bandera Roja”), él escribió: No tomé el Palacio de Invierno de los zares No ataqué el imperio de Hitler No soy lo que se llama un comunista Pero acaricio la Bandera Roja Y lloro. La poesía lo hizo famoso, pero Mr. Yevtushenko prefería describirse en sus últimos años como “poeta, escritor y cineasta”. Publicó docenas de volúmenes de poesía, traducidas a docenas de lenguajes. Actuó o apareció como si mismo en varias películas, dirigió otras dos, escribió ensayos, compiló tres volúmenes de sus fotografías y escribió dos novelas. Prefería Oklahoma antes que Nueva York. “En algunas ciudades de provincia se puede encontrar la verdadera alma de un país”, le dijo a The New York Times en 2003. “Me gusta la locura de Nueva York, pero Nueva York no es en verdad Estados Unidos. Es toda la humanidad en una gota. Tulsa es muy estadounidense”. Llamaba a Tulsa “el ombligo de la cultura mundial”. Allí el disfrutaba viendo a las jóvenes generaciones crecer por su cuenta. “Alguien está cerca”, decía él a una clase en tonos dramáticos. “Lo siento. Alguien siempre tiene que ser el líder de una generación. Alguien tiene que nacer. ¿Por qué no puede ser uno de ustedes?” Él había mostrado el mismo fervor una década antes, en julio de 1993, cuando la sala de conciertos del Rossiya Hotel de Moscú fue el lugar de la celebración de su cumpleaños 60 y por extensión un testimonial de los desafiantes poetas y escritores de la década de 1960 quienes atravesaron el puño férreo del estalinismo. “Hoy usted, uno de los iniciadores del movimiento de los sesenta, cumple 60”, escribió el Presidente Boris N. Yeltsin en una carta de felicitaciones a Mr. Yevtushenko. “Su talento innato y multifacético surgió brillantemente en los ahora distantes años del ‘deshielo’. La conciencia cívica de los poetas jóvenes jugó entonces un gran papel en la liberación espiritual y el despertar de las personas de Rusia”. Una mujer de cabello gris asintió, al decirle a un reportero: “Él fue un símbolo para nosotros entonces. Despues fue atacado por no ser exiliado o enviado a los campos de concentración, por hacer una carrera de protesta. Pero no muchos de nosotros tuvo el coraje de pararse ante el régimen, como lo hizo él. No se le puede culpar porque sobrevivió”. Mr. Yevtushenko, aún complaciente de las multitudes, vestido con un traje marrón, cerró la noche leyendo un poema llamado “Sixties Generation” (“Generación de los Sesenta”): “Fuimos una locura para algunos, a otros los ofendimos con nuestra fama. Pero los liberamos, a ustedes insultantes envidiosos. Dejémoslos cuchichear que somos mediocres, hipócritas, sobreseguros. Eso no hace la diferencia. ¡Somos legendarios, detestables, pero inmortales!” Traducción: Alfonso L. Tusa C.