lunes, 16 de noviembre de 2015

El oceano Pacífico se convierte en un gran evaporador.

John Schwartz. The New York Times. 02-11-2015. El huracán Patricia fue una sorpresa. El huracán del Pacífico oriental se fortaleció explosivamente antes de golpear la costa mexicana, excediendo por mucho las proyecciones de los científicos quienes estudian tales tormentas. Y mientras la fuerza de la tormenta se disipaba rápidamente al hacer contacto con la tierra, una pregunta quedaba en el ambiente. ¿Qué lo hizo tan monstruoso? Las explicaciones estaban todas sobre el mapa, con teorías que incluían el cambio climático (o no), y El Niño. Pero la respuesta es más complicada. La interacción de todas las clases de calentamiento que ocurren en el Pacífico en este momento puede ser difícil de afrontar, como en el huracán reciente, atribuir un evento climático a una sola causa es surrealista. Gabriel Vecchi, líder del grupo de variaciones climáticas y predicciones en el laboratorio geofísico de dinámica de fluidos de la National Oceanic and Atmospheric Administration en Princeton, B.J., comparó el reto con el juego de mesa Sospecha. “Existen todos estos sospechosos, y los tenemos a todos en la habitación ahora”, dijo él. “La clave está en determinar sistemáticamente quien estuvo cuando y donde, para poder excluir personas o fenómenos”. Al extender la metáfora, él notó que los criminales sospechosos podrían trabajar juntos como cómplices, y pudiera haber un personaje desconocido. Y como en todos los misterios, “Podría haber un final sorpresivo”. Para el momento, el océano más grande del mundo es un lugar crítico, se están creando tormentas y causando problemas a las personas y la vida marina a través del entorno del Pacífico y más allá. Una lista parcial incluye el fuerte sistema de El Niño que se ha formado alrededor del ecuador, y otra zona inusualmente persistente de agua caliente que ha estado apareciendo cerca de la costa norteamericana, llamada “the Blob”. Y un ciclo de mayor duración de calentamiento y enfriamiento conocido como la Oscilación Decadal del Pacífico puede estar cambiando de una fase de enfriamiento a una de calentamiento. Al frente de todo eso está el devastador progreso del cambio climático, causado por la acumulación de gases de invernadero generados por la actividad humana. Cada uno de estos fenómenos opera en una escala de tiempo diferente, pero por el momento parecen estar sincronizados, un poco como la manera como el secundero, el minutero y el horario se alinean al filo de la medianoche. Y los efectos colectivos pueden ser muy poderosos. Aunque ellos interactúan entre si, cada uno de estos eventos de calentamiento está siendo culpado por problemas específicos. “The Blob” ha sido asociado, entre otros efectos, con el inusual clima seco y caliente del oeste de Estados Unidos. Oceano afuera, las aguas calientes y pobres en nutrientes del Blob, cerca de cuatro grados Fahrenheit por encima del promedio, están alterando la reda alimenticia de la vida marina. Algunas especies de peces están apareciendo donde no son esperadas, incluyendo peces tropicales en la costa de Alaska, y un número inusual de cachorros de leones marinos y focas Guadalupe ha sido encontrado varado en las costas de California. El agua caliente ha sido asociada con explosiones de algas dañinas sin precedentes a lo largo de las costas que han tornado tóxicas a las conchas marinas y disminuido la pesca de estas en Washington, Oregon y California. “Una sola almeja tiene suficientes toxinas para matar una persona”, dijo Vera L. Trainer, la gerente del programa de biotoxinas marinas en NOAA’s Northwest Fisheries Science Center de Seattle. Los oficiales también ordenaron el cierre más grande de la pesca de cangrejo Dungeness en el estado. “Esto es muy preocupante”, añadió la Dra. Trainer. “Si este es un evento aislado que después desaparece t podemos olvidarnos de él en el camino, está bien. Si es una ventana al futuro, no es un buen futuro”. El patrón climático El Niño inusualmente fuerte, en el cual la superficie del océano se calienta y despide inmensas cantidades de calor a la atmósfera, ha llamado más la atención en parte porque tiende a traer lluvias torrenciales al sur de California, el cual está en medio de una intensa sequía, y temperaturas frías y lluvias a través del sur de Estados Unidos durante el invierno y potencialmente en la primavera. La banda norte del país tiende a tener condiciones calientes y secas). Pero los efectos de El Niño son experimentados en todo el planeta, y se han relacionado a la sequía en Australia y los enormes incendios de leña en Indonesia. La otra gran fuerza en curso, la oscilación decadal del Pacífico, algunas veces es un período largo, como lo implica el nombre, que abarca décadas, de aguas frías o calientes. Desde el año 2000, la oscilación ha sido en un estado frío, el cual dicen muchos científicos del clima ha permitido al océano dispersar una gran parte del calor generado por los gases de invernadero como parte del cambio climático. Esto, a su vez, puede haber frenado el aumento de las temperaturas superficiales promedio. Los científicos del clima han llamado a esta condición el hiato del calentamiento, y aquellos que niegan el remarcado consenso científico sobre el calentamiento han usado el hiato para aumentar las dudas acerca de la existencia del cambio climático. Ahora, sin embargo, la oscilación parece estar entrando en una fase de claentamiento, dijo Gerald A. Meehl, un científico de vasta experiencia del National Center for Atmospheric Research, y fuertes versiones de El Niño tienden a empujar el ciclo hacia una fase nueva. Así que la oscilación y El Niño “se pueden mezclar para ocasionar un gran cambio” hacia el calentamiento más que todo. “Eso va a proporcionar un impulso más grande al sistema de calentamiento global”, dijo él. “Estas cosas se unirán”. Es un hecho, 2015 está en camino de ser el año más caliente en los registros históricos”. El cambio climático podría provocar todos los ciclos interactivos de calor y frio en el océano. Los científicos todavía están tratando de determinar su efecto en los huracanes, aunque se cree ampliamente eso porque el calor del océano provee la energía de los huracanes, las tormentas más poderosas se desarrollaran con más potencia a medida que avance el tiempo. Si hay un componente claro y detectable de causa humana en la actividad de los ciclones de hoy es difícil de probar, dijo Thomas R. Knutson, un meteorólogo de investigación del laboratorio geofísico de fluidodinámica de NOAA en Princeton. “No esperamos necesariamente ser capaces de detectar estos cambios en esta oportunidad”, dijo él. Mientras ningún evento individual del clima puede ser relacionado al cambio climático, el calentamiento contínuo parece estar incrementando la fuerza potencial de las tormentas, dijo Kerry Emmanuel, un experto en huracanes del Massachusetts Institute of Technology. Si las tormentas alcanzan su potencial completo depende de otros factores, dijo él. Estadísticamente, sin embargo, aún hay muy pocas tormentas que muestran que los huracanes más fuertes están siendo causadas por el cambio climático. Un fenómeno que parece ser el resultado de la combinación de El Niño, The Blob y el cambio climático. NOAA anunció este año que el mundo estaba en medio de solo el tercer evento global de blanqueo de corales registrado. El blanqueo severo puede llevar a la muerte de los arrecifes, y la pérdida de hábitat para vida marina y la protección para la costa ante las tormentas. El evento actual empezó en 2014 en el Oceano Pacífico y ha persistido hasta este año, con los efectos del Blob sintiéndose más cerca de las costas de Hawaii, hasta donde se extiende la cola occidental del recuadro de agua caliente. ¿Esto es absolutamente lo peor que ellos hayan visto”, dijo C. Mark Eakin, el coordinador de NOAA’s Coral Reef Watch. “Es solo la tercera vez que han visto una masa de coral blanqueada en Hawaii; la última vez fue el año pasado”. Y debido a los eventos de El Niño, se extiende desde el invierno de un año has la próxima primavera, “estamos muy próximos a ver el blanqueo de este año seguir hasta 2016 y aun ser peor en 2016”, dijo él. Un Pacífico más caliente también significa mares más altos en la costa de Estados Unidos, debido a que el agua caliente se expande y los vientos generales que fluyen desde oeste a este empujarán el agua contra la costa. Eso puede agregarse a un incremento al cual William Sweet, un oceanógrafo de NOAA basado en Maryland, llama inundación de las areas costeras bajas. Aún un incremento general de 15 centímetros de El Niño puede, combinado con las tormentas, causar un incremento pronunciado de tal inundación, dijo él, añadiendo que San Francisco podría ir desde un promedio de 12 días de inundación hasta 21 este año, y La Jolla, Calif., de seis a diez. Nicholas A. Bond, un meteorólogo de investigación en el instituto cooperativo de University of Washington de NOAA quien le diera al Blob su nombre, dijo que el cambio climático podría hacer las condiciones de El Niño más comunes. “Eso tendría implicaciones monstruosas”, dijo él. Y aunque las naciones del mundo desarrollado como los Estados Unidos podrían tomar medidas para adaptarse a las condiciones del cambio, “Va a ser un lugar diferente”, dijo él. A pesar de todos los nubarrones actuales sobre el Pacífico, literales y metafóricos, el Dr. Bond se las ingenió para hacer una observación valiosa. La confluencia de problemas puede servir como un “llamado a despertar”, y como anunciador del cambio climático, dijo él. “Tenemos una oportunidad real con esta clase de eventos para ver lo que va a pasar, y mostrarle a los señores, ‘Hey, esta es la consecuencia de jugar con el clima’”. Traducción: Alfonso L. Tusa C.

1 comentario:

  1. Nadie dice o escribe nada ya que vivimos en la NEGACION de que cambio climatico existe y que de a poco será mas grave en la proxima decada.

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